En Un Mundo Alterno: Una Historia Alterna

viernes, 13 de marzo de 2015

Una Historia Alterna

I. Un Nuevo Comienzo

Conrado seguía sin poder creer lo injusto que era el destino. Cuando sentía que por fin había encontrado esa felicidad que tanto anhelaba, todo había cambiado en un instante.

-maldito Fulgencio- masculló molesto

Pero no podía darle todo el crédito al médico por la desgracia que era de nuevo su vida. una serie de acontecimientos que conspiraron en su contra y todo... desde la aparición de Alicia. y ni su ex novia era la culpable, solo eran ellos, Aurora y él; aunque no quiso admitirlo supo que todo cambió con la marcha de Aurora a Madrid. Sonrió triste. Ahora sabía que eso del amor no iba con él.

Aurora lo había dejado sorprendido... no podía creer que aquella dulce y aguerrida joven que tanto juró amarlo para siempre, se había convertido en alguien tan diferente... alguien que tan serenamente le agradecía las cosas que había hecho por ella pero que no estaba segura de su amor porque su corazón albergaba sentimientos por alguien mas.

Si bien sospechaba que los sentimientos de Aurora habían cambiado, tuvo que comprobarlo viendo las largas y confusiones de la que una vez fue su mico adorada. No era precisamente su deseo dejarla pero no podía permanecer con alguien que solo le tenía agradecimiento... eso no era suficiente y tarde o temprano, si se casaban, serían infelices, ella posiblemente amando a otro y el amándola a ella. No podía seguir en Puente Viejo... el lugar en el que, por un tiempo, se sintió en casa. Sabía que extrañaría a todos pero no podía seguir cerca de ella... sin verla feliz sintiéndose mas miserable de lo que ya era.

Así que, nuevamente montó a Cairo, destrozado pero sin mirar atrás y se alejó de Puente viejo... para comenzar otra vez y se aseguraría de no cometer los mismos errores. Pero antes, sabía que debía una explicación... como necesitaba poner tierra de por medio para aclararse, le pareció una buena idea un viaje... pero no a cualquier sitio; necesitaba conversar con Gonzalo, después de todo, era lo que su amigo se merecía... una explicación de frente, necesitaba que Gonzalo supiese que no podría cumplirle la promesa que le hizo antes de embarcarse: no podría cuidar a su hermana ni su patrimonio... sabía que el comprendería.... y eso también le serviría para despedirse de dos buenos amigos antes de partir lejos de la que sintió, sería su vida.

Y mientras el barco se alejaba del puerto un golpe le atravesó el pecho, el mismo que siempre aparecía cuando iniciaba un nuevo capitulo en su vida: nervios, tristeza, expectativa y algo que no podía definir; lo poco que le quedaba de su corazón latía emocionado poniendo las esperanzas en ese nuevo mundo al que llegaría.